Biblioagrarias

 

La Transformación Agraria: origen evolución retos.
Secretaría de la Reforma Agraria (Sector Agrario), volúmenes 1 y 2, México, 1997, 426 pp.

 

Con un profundo conocimiento del campo mexicano y de su historia, las instituciones que conforman el Sector Agrario: Secretaría de la Reforma Agraria, Procuraduría Agraria, Registro Agrario Nacional, Comisión Reguladora de la Tenencia de la Tierra, Instituto Nacional de Desarrollo Agrario y Fideicomiso Fondo Nacional de Fomento Ejidal, se dieron a la tarea de editar el libro La Transformación Agraria: origen evolución retos, que representa una fuente de amplio sustento histórico y documental para el estudio del campo mexicano.

 

Concebida como una obra básica de consulta, La Transformación Agraria es un amplio análisis histórico de los múltiples cambios que ha experimentado el campo en México, y cuyas transformaciones han representado procesos históricos de tipo político, social, cultural y artístico.

 

La obra aborda en su primer volumen el origen de la cuestión agraria en México, a partir de un vasto recorrido que inicia con la descripción del calpulli, base de la organización social en el México antiguo, pasando por la colonización española hasta el inicio de la Revolución Mexicana, y que se extiende hasta los momentos más destacados de lo que se conoce como la época del reparto agrario. Presenta también los antecedentes de la reforma Constitucional de 1992, así como las motivaciones que llevaron a realizar los cambios que necesitaba  el campo mexicano para hacerlo más productivo y adaptarlo a la realidad demográfica, económica y social de nuestros días.

 

En este primer volumen se describen también los ejes conductores de
la actual política en esta materia, a saber: abatimiento del rezago agrario; regularización de predios en posesión precaria; certificación de derechos ejidales y titulación de solares; certificación de comunidades; regularización de colonias agropecuarias; y deslinde de terrenos baldíos, entre otros. Adicionalmente, se incorpora información sobre los avances del Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares (PROCEDE) hasta enero de 1997, que presenta las características actuales de los sujetos agrarios y permite apreciar la gran diversidad y la nueva estructura ejidal en el país.

 

El segundo volumen presenta el trabajo denominado “Testimonios del PROCEDE”, constituido por una recopilación de entrevistas, anécdotas, relatos y experiencias vividas por la gente del campo que participó directamente en los trabajos de aplicación del citado programa. También, incluye un anexo estadístico con los principales indicadores básicos de los núcleos agrarios del país y cuadros en los que se constatan los avances —por entidad— de las distintas dependencias participantes del sector en su trabajo directo en el campo.

 

Sin duda, esta obra contribuye a la mejor comprensión de la problemática del campo mexicano; fomenta la reflexión en torno de la nueva cultura agraria y aporta una visión histórica del agro nacional de frente a las transformaciones legales e institucionales de los años recientes.

 


Las transformaciones de la agricultura o las paradojas del desarrollo regional. Tierra Caliente, Guerrero.
Tomás Bustamante Álvarez, Juan Pablos Editor-Procuraduría Agraria, México, 1996, 308 pp.

 

 

La agroindustria se proyecta hoy como factor de desarrollo productivo de primer orden para este fin de milenio en nuestro país. Ante un escenario de globalización económica y de su incidencia real, particular y evidente en el campo guerrerense, Las transformaciones de la agricultura o las paradojas del desarrollo regional.
Tierra Caliente, Guerrero
, es una obra que repasa, previo análisis histórico, los principales aspectos preocupantes que enfrenta el desarrollo rural regional, generados por los procesos productivos inherentes al modelo neoliberal y por la modernización de las formas de producción en el campo.

 

Este trabajo representa una valiosa aportación al estudio del sector desde una óptica concreta y definitiva: el impacto generado por el modelo económico en boga, que gradualmente ha ido determinando la nueva problemática regional en el estado de Guerrero. Asimismo, da cuenta de las principales transformaciones agrícolas, económicas y sociales de la región de Tierra Caliente, como consecuencia de la interacción de factores diversos, de tipo histórico-estructurales y coyunturales que, para el periodo de análisis, destacan las fuerzas de cambio desatadas por la Revolución mexicana y, más recientemente, en la integración creciente de México en las relaciones de la economía mundial.

 

El autor, Tomás Bustamante, considera a la región de Tierra Caliente como representativa de esos grandes cambios. En tanto, la integración de esta región dentro de esos procesos —añade— se conforma como un oasis productivo y moderno en un estado caracterizado por su atraso económico.

 

La tesis central que plantea Bustamante Álvarez,  se refiere a la definición de la región de Tierra Caliente como un eslabón de las transformaciones económicas y agroalimentarias que se han desarrollado bajo la acción del capital financiero internacional. Es una forma de producción que se identifica con la reconstitución de una economía de enclave, con un sistema similar a la de agromaquila y con inversiones volátiles de tipo coyuntural, sin integración a la estructura económica permanente, que no revierten utilidades en la diversificación productiva y en la economía regional. Todo esto sustentado en el uso y aprovechamiento de recursos naturales, sociales e infraestructurales, garantías de óptimos resultados productivos, de reproducción y acumulación de capital. La actual economía política que se practica en el país ha relegado a la agricultura a una posición de desprotección y debilidad productiva; en suma, ha dejado a los campesinos y demás productores no capitalizados bajo el poder del capital agroindustrial trasnacional.

 

Con la presente obra, el doctor Tomás Bustamante obtuvo el “Premio Estudios Agrarios 1996”, convocado por la Procuraduría Agraria.

 


Campesinos, Artículo 27 y Estado mexicano.
Elio Alcalá; Luz Ma. del Carmen Brunt Rivera; Ma. de la Luz Parcero López
y Teófilo Reyes Couturier, inah-Plaza y Valdés, México, 1996, 246 pp.

 

En el actual contexto mundial, conformado por procesos de globalización económica y de libre mercado, aunado a una crisis económica nacional, el campo mexicano padece rezago y marginación; los impactos del atraso económico y productivo, así como la falta de tecnología persisten y obstaculizan la transformación productiva de este sector.

 

Frente a este panorama, el libro Campesinos, Artículo 27 y Estado mexicano analiza las características y perspectivas que el campesinado mexicano tiene frente a la honda crisis económica por la que atraviesa el país, incluyendo su cercana relación con el Estado y los intentos de éste por ayudar al sector, mismos que han tenido impactos diferenciados según las estructuras productiva y social de cada entidad o región.

 

Para Alcalá, Brunt, Parcero y Reyes —coautores del libro— la presencia campesina, lejos de anularse, paradójicamente se ha consolidado de manera independiente de la explotación y de las distintas políticas gubernamentales aplicadas en el campo mexicano. Apuntan algunas de las características que definen la actual situación en el ámbito agrario: mantenimiento del sistema de explotación capitalista; legitimación de la participación estatal como único responsable de la conducción y definición socioeconómica y productiva del campo, al tiempo que regula la crisis del sector; reforma del Artículo 27 constitucional y creación de la Ley Agraria, con el fin de canalizar mayores recursos económicos y financieros del sector privado hacia la agricultura, como una cuestión decisiva para la capitalización del agro, entre otras.

 

 

De igual forma, los autores puntualizan dos tendencias respecto de la reforma del artículo 27 Constitucional; por una parte, se afirma que servirá para que se realice la venta masiva de tierras ejidales y, en consecuencia, desarticulará al sector social del campo; por la otra, se afirma que, gracias a la reforma, fluirá la inversión privada hacia el campo, por lo cual será capitalizado. Así, la primera tendencia, tiene la finalidad del reparto agrario, el derecho de las sociedades mercantiles para adueñarse de tierras ejidales, la privatización y venta del ejido. El fin perseguido por el Estado fue y es la transferencia de los recursos campesinos a otros sectores de la economía que, de una u otra forma, signifiquen elevar los niveles de productividad y rentabilidad en el campo.

 

Para finalizar, los autores analizan la interrelación de algunos de los elementos de dichas tendencias para el campo y los campesinos. La articulación del nuevo esquema jurídico con la crisis agrícola, el repliegue del Estado en su trabajo regularizador y de fomento, la viabilidad de una forma básicamente de producción campesina y el fracaso del proyecto integral de desarrollo vinculado a la reforma constitucional, a largo plazo señalan al único beneficiado: el gran capital transnacional que sí está en condiciones de invertir.

 


 

Mujeres en el medio rural,
Cuadernos agrarios
, núm. 13, enero-junio, nueva época, año 6, Cuadernos Agrarios A.C., México, 1996.

 

 

Nuevamente la revista Cuadernos agrarios, en su número 13, dedica su espacio a la problemática de la mujer rural; lo había hecho en los años setenta con la poca información que se contaba de la materia en aquellos años. Las condiciones de las mujeres en el campo actualmente no son muy distintas a las de ese tiempo, incluso se han agudizado haciéndolas, junto con niños y ancianos, el sector más vulnerable.

 

La presencia de la mujer en el medio rural —crianza, trabajo agrícola, manutención, reproducción familiar y social— es cada vez mayor, no sólo por el aumento de la emigración de la mano de obra varonil, sino como una opción que está sirviendo de mastil en las economías familiares y que, además, viene funcionando como eje, en muchas ocasiones, de la producción rural.

 

Caracterizada como un espacio de investigaciones críticas, Cuadernos agrarios presenta
una serie de reflexiones y experiencias acerca de la problemática, acción y movilización de las mujeres del campo en nuestros días. Los trabajos de Isabela Droy, Guadalupe Huacuz, Paloma Bonfil, Emma Zapata y Marta Mercado, Sara Lara, Josefina Aranda, Margara Millán, Inés Castro y Verónica Vázquez, abordan aspectos de importancia como la situación de las mujeres en relación con la tenencia de la tierra; el desarrollo rural; los proyectos productivos y sociales; el trabajo asalariado y parcelario, y la salud, entre otros.

 

Como una muestra de las posibilidades que ofrece el tema de la mujer, Cuadernos agrarios da cuenta de los procesos que protagonizan y las reflexiones que suscitan dentro del panorama mexicano. Es así, que la mujer ya no puede quedar fuera del desarrollo rural, es parte primordial y promotora del cambio que se viene dando en lo rural y, desde ahí, lucha por mantenerse y reproducirse como bastión de la sociedad rural.

 

 


Mercado de tierras en México.
uam
, Xochimilco-fao, Roma, 1995, 248 pp.

 

 

México está inmerso en los procesos de globalización y de profunda transformación social encaminada hacia una nueva democracia. En esa óptica, el país no está exento del amplio  proceso de transición que vive América Latina, desde hace una década y que obligó en gran parte a remodelar la mayoría de los esquemas institucionales y a adoptar políticas de extrema austeridad fiscal.

 

Actualmente, ante la liberalización de los mercados y la prioridad de las privatizaciones, la tierra —recurso históricamente empobrecido— ha adquirido una nueva connotación en los mercados nacionales, tanto para los grandes productores como para los pequeños propietarios y los campesinos.

 

La obra que nos ocupa es el primer estudio comparativo referido a cuatro realidades campesinas diversas en el marco nacional: Tlaxcala, Sonora, Veracruz y Puebla. El mercado de tierras se considera un elemento condicionado por las reformas económicas, el acceso al crédito o a la asistencia técnica, y, por cuestiones políticas, como el desarrollo de las organizaciones campesinas autónomas y la democratización del mundo rural.

 

A partir de la experiencia histórica, se refuerza la posibilidad de desarrollar un mercado de tierras de largo alcance con una participación campesina dominante, debido a que la tendencia general entre los ejidatarios es conservar su tierra y avanzar en el progreso de sus comunidades. La tierra es una conquista histórica, es el elemento dominante de la identidad de la población rural y el patrimonio familiar.

 

El presente texto retoma una serie de propuestas de proyectos de los mismos campesinos, que  se expresan como alternativas de participación en los mercados y la política económica. Asimismo, puntualiza demandas como la creación de una institución bancaria que otorgue créditos hipotecarios, medidas para superar el minifundio y la concentración de tierras, fomento al desarrollo autónomo de las organizaciones económicas campesinas, y una reconversión productiva acorde con las necesidades de mercado.

 

Los especialistas recomiendan estudiar los mercados regionales de tierra con las formas productivas y paisajes rurales que predominan en una región determinada y, básicamente, con los sujetos particulares que sintetizan estas concepciones y prácticas sociales, para comprender lo que al respecto acontece a nivel nacional. De lo contrario, se corre el riesgo de inventar estructuras generales que no responden a la realidad sino a esquemas teóricos preconcebidos, que distan mucho de la realidad que se vive en el campo.

 

La actual legislación agraria, sus consecuencias y repercusiones sobre el campo mexicano, también son temas de este libro y marcan un claro énfasis sobre el perfil de la propiedad de la tierra ejidal y las comunidades campesinas.

 

Mercado de tierras en México presenta los resultados del estudio llevado a cabo en México entre 1992 y 1994 por Luciano Concheiro, coordinador de la Maestría de Desarrollo Rural de la Universidad Autónoma Metropolitana de Xochimilco, en colaboración con Herminio Baltazar, Odile Hoffmann, Elsa Almeida y Ricardo Pérez Avilés.

 

 

 


Empobrecimiento rural y medio ambiente en la montaña de Guerrero.
Marco Antonio Ramírez Mocarro, Juan Pablos Editor-pa, México, 1996, 96 pp.

 

Como una de las múltiples aristas que conforman el panorama del México de hoy, la situación rural y el impostergable cuidado del impacto ambiental, son factores que desempeñan un papel muy importante para el desarrollo económico y social.

 

El concepto de pobreza —tema de cualquier mesa de discusión de política económica y social— existe sin que esencialmente afecte al entorno ecológico; sin embargo, los modelos económicos aplicados hoy día, programas y políticas, afectan necesaria y directamente a los recursos naturales.

 

En Guerrero, y especialmente en la región de la Montaña, se presentan dos factores determinantes: pobreza extrema en una población mayoritariamente rural y un alto grado de deterioro de los recursos naturales.

 

En el presente ensayo —que se hizo acreedor al Premio Estudios Agrarios 1996, otorgado por la Procuraduría Agraria—, Marco Antonio Ramírez Mocarro analiza la relación que la dinámica demográfica, productiva y ocupacional de la población tiene con los niveles de vida, los patrones de uso y deterioro de  recursos naturales, a través de las condiciones, mecanismos y procesos que generan el flagelo de la pobreza y la degradación del medio ambiente.

 

Este análisis parte de la comprensión de lo que ocurre en los niveles locales, en los cuales se producen las interacciones directas entre la sociedad y la naturaleza. ¿Puede sobrevivir una economía campesina de subsistencia y deficitaria en tiempos de hegemonía del libre mercado? ¿El modelo económico prevé el empobrecimiento social y ecológico de las zonas como la montaña de Guerrero?

 

La dinámica económica, junto con los procesos de polarización y desigualdad en el campo mexicano, relegó a la montaña de Guerrero a un espacio de agricultura campesina pobre y atrasada, de difícil acceso y olvidada por las inversiones productivas y la ayuda financiera.

 

La integración de los mercados en bloques económicos, que a su vez aglutina los procesos de desarrollo de los distintos estratos sociales, pareciera que se olvidó de los rezagos y carencias de los pequeños y grandes grupos sociales que no alcanzan los niveles de bienestar que proclaman las políticas económicas.

 

Una muestra de las repercusiones y de la búsqueda de posibles soluciones podrían desprenderse de trabajos como el presente ensayo de Ramírez Mocarro, texto que invita a la reflexión y a la participación de todos los estudiosos del medio ambiente, particularmente aquéllos que se centran en comprender la compleja relación entre población y ambiente.

 


 

El municipio en la consulta nacional sobre derechos y participación indígena.
Cuadernos del Instituto Nacional de Solidaridad, Sedesol, México, 1997, 350 pp.

 

 

La Consulta nacional sobre derechos y participación indígena, que se llevó a cabo entre noviembre de 1995 y marzo de 1996, representó un amplio espacio de participación social en la que las voces indígenas de todo el país tuvieron oportunidad de expresar su sentir, sus planteamientos y sus puntos de vista sobre el vínculo indisoluble que se establece entre sus demandas y el ámbito geográfico donde habitan: el municipio.

 

El Instituto Nacional de Solidaridad tuvo a su cargo el análisis, el tratamiento y la consolidación de los resultados de esta consulta, dando prioridad al respeto de la identidad cultural de los pueblos indígenas. Este trabajo de compilación, retrata además los esfuerzos del Instituto por arraigar en todos los estratos sociales del país, empezando por la vida municipal, el ejercicio pleno de los derechos indígenas y la incorporación de los pueblos al desarrollo general del país en condiciones de equidad y justicia social.

 

El municipio en la consulta nacional sobre derechos y participación indígena, presenta los planteamientos de los distintos grupos indígenas en forma íntegra. Los temas abordados se refieren fundamentalmente a los usos y costumbres en la organización jurídica y política; cultura indígena; participación y representación política; derecho consuetudinario e impartición de justicia; desarrollo y bienestar social; tierra y patrimonio; migrantes y jornaleros, y mujer indígena. Adicionalmente, se incluye una serie de anexos sobre el marco jurídico que reglamenta la cuestión indígena.

 

Es importante destacar que este material retoma ante todo la visión que expresaron los propios representantes de los pueblos indígenas a lo largo de la consulta, sobre lo que son sus derechos en el marco nacional y de cuáles son algunas necesidades insatisfechas que impiden el ejercicio pleno de esos derechos en el municipal.

 

Esta compilación del Instituto Nacional de Solidaridad, tiene el propósito de contribuir al enriquecimiento de la discusión y reflexión del tema indígena en México, en la perspectiva de aportar elementos informativos de primera mano al actual debate sobre los cambios constitucionales a los derechos de los pueblos indígenas.