Propiedad y organización rural en el México moderno.

Moguel, Julio y José Antonio Moreno (coords.), Facultad de Economía (UNAM)-Juan Pablos Editor, 2 tomos, 1ª edición, México, 1998.

Propiedad y organización rural en el México moderna forma parte de una colección sobre la investigación agraria que se lleva a cabo en diferentes universidades del país bajo el título "Propiedad y organización en ejidos y comunidades del norte y sur de México", en el proceso de cambio generados por las reformas agrarias de 1991-1992.

Coordinan esta publicación Julio Moguel y José Antonio Romero, quienes presentan los principales argumentos que se dieron en torno a la discusión sobre las modificaciones del Artículo 27 constitucional, la transformación agraria y el Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares Urbanos (Procede) en áreas rurales específicas del país.

La obra se compone de dos tomos; en el primero se plantean líneas generales de interpretación y de debate sobre la nueva Ley Agraria, el mercado de tierras y los movimientos rurales en el ciclo vital de dichas transformaciones legislativas, así como en torno a las primeras fases de aplicación del Procede. También se abordan dos de los principales procesos agrarios que experimentó el campo mexicano; el primero se refiere a la desamortización de tierras y el segundo a la regularización legal de la propiedad. Este par de fenómenos vienen produciendo, en forma paulatina y silenciosa, cambios en la estructura agraria del país.

En otros de los ensayos se presentan las características generales de los ejidos regularizados y de los sujetos agrarios (ejidatarios, posesionarios y avecindados), el destino de las tierras que determinaron las asambleas ejidales, la desigualdad en la distribución de la tierra parcelada, la estructura agraria y los derechos sobre la superficie parcelada, de uso común y solares urbanos. También se presentan los avances y obstáculos que enfrenta el Programa, los inherentes a la situación interna de los ejidos, los de carácter operativo, institucional y sociales.

Por último se presenta un trabajo sobre el mercado de tierras, el cual pretende ser una doble provocación porque, si bien es contrario a las políticas neoliberales, "acepta" al mercado, y en especial al mercado de tierras, como uno de los espacios básicos donde se construyen las alternativas sociales, posición que podría sintetizarse en el pronunciamiento por una nueva reforma agraria asistida por el mercado.

El segundo tomo se compone de ocho ensayos que recogen el impacto de la nueva Ley Agraria y el Procede en los estados de Veracruz, Chiapas, Oaxaca y Sonora. El primer estudio analiza la promesa de democratización del sector ejidal como resultado de las reformas al Artículo 27 y la legislación agraria, concentrándose en un área específica: Jalapa-Coatepec, la zona productora de café del norte de la región central de Veracruz.

El segundo artículo se llama "La cuestión agraria en Chiapas. Seguridad y justicia en la tenencia de la tierra"; en él se abordan temas como las tierras de los pueblos indios, territorio y organización indígena, autonomía y pueblos indios, la regularización de tierras, fin del reparto agrario y las formas de tenencia de la tierra.

Los siguientes estudios de caso son: interpretación de las reformas agrarias en dos ejidos de Oaxaca: diferenciación, historia e identidad; La reforma ejidal en el Istmo de Tehuantepec. Los casos de Charis y Emiliano Zapata; Riego y diferenciación agraria en el Istmo de Tehuantepec. El caso del DR-19; La reforma del ejido en Tuxtepec. Campo y campesinos en San José Chiltepec, San Bartolo y Santa Catarina; Los ejidos conurbados de Hermosillo y las reformas al Artículo 27; Propiedad agraria, regularización y cambios en la organización rural en México. Un balance del Procede en los estados de Chiapas, Oaxaca y Sonora.