Editorial

Ante los vertiginosos procesos que se viven hoy en día, se hace necesaria una pausa, un tiempo para reflexionar acerca de lo que ha sido, es y podría ser el campo y todo lo que en sí comprende. A nadie sorprende que en la actualidad se generen foros para analizar la historia, reciente y remota, del país y, más específicamente, de la cuestión agraria. Síntesis y suma, análisis y resumen, cualquiera que sea la conclusión de la justa reflexión sobre el campo mexicano, necesariamente debe traer buenos vientos para revalorar la situación y poder así enfrentar la difícil problemática que nos ocupa.

En este número 10 de Estudios Agrarios, Arturo Nicolás Rodríguez reflexiona acerca del Programa de mayor impacto del sector agrario en los últimos años, en su texto "Procede: conceptos básicos y un perfil sobre sus avances", nos dice que, si bien el Procede alcanzó consensos sociales importantes ratificando y consolidando el proceso de entrega de tierras a los ejidatarios, toda vez que ofrece certeza jurídica y seguridad colectiva e individual mediante los respectivos títulos y certificados, no es suficiente, pues hay que devolverle al campo lo que durante décadas él mismo generó. Desde que se impulsaron las reformas, afirma el autor, los diagnósticos de los núcleos agrarios apuntaron sobre la necesidad de capitalizar esas tierras como medida indispensable para elevar los niveles de bienestar, lo cual no ha ocurrido como se esperaba, pero esto no debe verse como el regreso a los viejos modelos paternalistas, sino como requisito indispensable para alcanzar la autosuficiencia alimentaria, el crecimiento económico sostenido y el desarrollo social y económico de la población en su conjunto.

Por su parte, y dentro de la tónica del Procede, Pedro Francisco Sánchez Nava aborda al Programa desde la perspectiva arqueológica, específicamente, tratando la cuestión de la conservación del patrimonio arqueológico misma que, según sostiene en su documento "El Procede y el patrimonio arqueológico", es de suma importancia que la conozcan los hombres y las mujeres del campo, pues quizá esa pueda ser la forma cabal de lograr el objetivo de salvaguardar el patrimonio arqueológico sin menoscabo de los compromisos del Procede.

En el número anterior, hablamos de la necesidad de conformar a la Revista Estudios Agrarios como un espacio plural de discusión y debate de los temas del agro, sin dejar de lado las cuestiones del mundo. Por ello, y sabiendo que las distintas experiencias sobre el agro siempre nos pueden ilustrar, y en el caso de Cuba sin duda puede ser así, presentamos en esta ocasión el trabajo de Pablo Fernández Domínguez, titulado "El nuevo modelo agrario cubano: un desafío en el umbral del tercer milenio", en el cual realiza un análisis de la problemática agraria de su natal Cuba, abordando desde las cuestiones productivas y económicas hasta las sociales y del medio ambiente. Es evidente que el pueblo cubano —en su conjunto— se enfrenta a una difícil situación agroalimentaria, que el reajuste organiza-cional y tecnológico representa un desafío en las actuales circunstancias financieras externas, que condiciona severamente tanto la producción como la importación de alimentos, y que por ello se impone un urgente y dinámico proceso interactivo que propicie la pronta reactivación de la producción. Los pasos iniciales ya se han dado, según el autor, pero hay que darles continuidad, profundizar en las reformas y perfeccionar los mecanismos; el nuevo proyecto deberá erigirse sobre la base de la concertación con los grupos sociales involucrados, conjugando los aspectos sociales con los económicos y los ambientales.

En "Mujeres campesinas en el umbral del nuevo siglo", Gisela Espinosa nos recuerda cómo la mujer campesina ha sido, es y seguirá siendo el bastión de la dinámica económica familiar, no sólo porque representan a más de la mitad de la población rural del país, sino porque vienen asumiendo nuevas funciones en la vida comunitaria y productiva, desde el acceso a la propiedad jurídica de la tierra y a puestos de representación, hasta el hecho de tomar decisiones respecto de sus propios cuerpos y su maternidad. La autora afirma que el mundo del libre mercado coloca a los campesinos como perdedores y, como consecuencia, a las mujeres ante una competencia por los escasos y mal pagados puesto de trabajo que ofrece la sociedad moderna; un mundo que les exige cambios radicales en la forma de vivir y de enfrentarlo.

Miguel Ángel Vidaurri nos presenta los "Principales resultados del Censo de órganos de representación de ejidos y comunidades", encuesta que realizó la Procuraduría Agraria a mediados de este año, con el fin de detectar las necesidades de capacitación y organización de los ejidos y comunidades. Se pudo constatar la vigencia de los órganos de representación, así como la presencia de la mujer en los mismos; de qué forma está ocurriendo la inscripción de los órganos, así como el poder detectar por qué no se da en ciertos casos.

Entre otra información, Jesús Velasco Mata nos ofrece el informe "Ejecución de proyectos de desarrollo por el Fifonafe, con ayuda alimentaria del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas", donde se detallan los lineamientos y compromisos —así como los resultados obtenidos— acordados entre el gobierno mexicano y el Programa Mundial de Alimentos para apoyar proyectos de desarrollo económico y social en zonas rurales marginadas.

Cerrando la sección de Análisis, se presenta el trabajo colectivo "La mujer veracruzana y su participación en el medio rural", el cual surge de los primeros resultados de la Encuesta nacional sobre mujeres ejidatarias, posesionarias y avecindadas que realizó la Dirección General de Estudios y Publicaciones de esta Institución, entre julio y agosto del presente año, la cual robustece la tesis del proceso feminización del agro en nuestro país, así como la importancia que la mujer campesina tiene hoy en día dentro de la economía familiar.

En la sección de Foros, Luis Enrique Pérez Mota, Secretario de Desarrollo Agrario en el estado de Chiapas, nos ofrece un texto crítico sobre la situación económica y social que prevalece en dicha entidad; cabe señalar, que este documento nace de la exposición que el autor hizo en la 99ª sesión del Copecose y que, por su importancia, se pensó presentarlo como artículo en nuestra revista.

En esta ocasión, y como se dijo en el número anterior, se presentan "Estadísticas" del Procede, con el fin de que puedan ser útiles para quienes trabajan las cuestiones del campo, ya que es información actualizada sobre los avances del Programa.