Examen de las políticas agrícolas en México
Políticas nacionales y comercio agrícola

OCDE, Francia, 1997, 236 pp.

Como respuesta a los cambios vertiginosos que han venido sucediéndose en el mundo entero, México puso en marcha un programa de reformas que buscó adecuar la situación nacional al entorno internacional. Lejos de ser una excepción, el sector agropecuario fue objeto de una profunda reforma institucional.

Sin embargo, la precaria infraestructura básica y la falta de redes eficaces de comercialización, aunadas a la carencia de actividades de investigación y desarrollo, continúan obstruyendo el posible avance de las zonas rurales de forma que éstas puedan incluirse de manera eficaz dentro de una economía de mercado.

Basándose en el método de cálculo del apoyo implícito en las políticas agrícolas mediante el uso de los equivalentes del subsidio a la producción y al consumo (ESP y ESC respectivamente), la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) realizó un estudio que analiza la evolución de las políticas agrícolas en México. El estudio resalta el proceso de apertura económica que ha venido experimentando México desde mediados de los años ochenta, dejando con ello atrás la política basada en la sustitución de importaciones. Este giro en la política económica se ha caracterizado por una mayor orientación de mercado; un régimen comercial más libre; la privatización de empre- sas públicas, y un proceso de desregulación en diversos sectores, entre los que hay que destacar al sector agroalimentario.

La combinación de estos factores ha significado profundos ajustes en el sector agrícola mexicano, cuya situación actual se caracteriza —según la OCDE— por una estructura agrícola compuesta de explotaciones comerciales tradicionales (pobres pero con gran potencial) y de explotaciones de subsistencia (muy pobres y sin ningún potencial).

La importancia relativa que en México revisten el sector agrícola y la economía rural —comparada con la de la mayor parte de los países miembros de la OCDE— hace que la evolución macroeconómica sea particularmente influyente sobre la agricultura. Examen de las políticas agrícolas en México muestra cómo la política macroeconómica y la crisis desatada en 1995 influyeron sobre las señales de los precios en el sector agrícola, y se indica que la evolución macroeconómica deberá traducirse en la pauta para continuar el proceso de reforma de la política agrícola.

Resulta evidente que, para alcanzar los objetivos de la política agrícola en México, harán falta no solo medidas específicas, sino también un equilibrio entre los objetivos del ajuste estructural, la lucha contra la pobreza, la protección del medio ambiente y la generación de empleos económicamente eficientes.

Será esencial que los progresos en la reforma de la política agrícola se consoliden en el marco de la evolución macroeconómica y del desarrollo de una economía abierta. Asimismo, se perfila como necesario reforzar las políticas orienteadas a la educación, la capacitación y la investigación, así como promover el desarrollo de fuentes alternativas de ingreso y de oportunidades de empleo en las zonas rurales, todo ello con el fin de que los agricultores puedan responder de manera eficiente y eficaz a las señales del mercado, y que el sector agrícola pueda desarrollarse sobre bases firmes.

Los juicios formulados en Examen de las políticas agrícolas en México. Políticas nacionales y comercio agrícola, se fundamentan sólidamente en datos de carácter oficial, mismos que se presentan en tablas y cuadros con el fin de soportar el análisis.